En la Isla Chuit se concretó una función de la compañía Internacional Chincho Poroto. El festival se desarrolla gracias al apoyo del Ministerio de Las Culturas, Artes y Patrimonio
Este martes fue un día histórico para el Festival Internacional de Teatro Itinerante Por Chiloé Profundo. Por primera vez, el evento llegó hasta las Islas Desertores, cumpliendo así un anhelado deseo de la producción de llegar con una obra hasta estos apartados parajes de la geografía del sur del país, la que tuvo una excelente recepción por parte de la comunidad, especialmente los niños que disfrutaron, rieron y se emocionaron con los títeres de la compañía argentina Chincho Poroto.
Hasta la escuela de Isla Chuit, llegó el equipo de la red CapaNegra junto a los personajes de Teatrín Viajero, Zapateo y Sarandeo, quienes fueron recibidos por las familias y comunidades educativas del lugar, tras cinco horas de navegación, en una jornada privilegiada pues el sol acompañó todo el viaje. Para la directora del encuentro cultural, Gabriela Recabarren, se trató de un hito tras 18 versiones de itinerancia por muchos rincones de la Región de Los Lagos con teatro gratuito, llegar a una de las Islas Desertores. “Estos días había llovido un montón y creíamos que iba a ser muy difícil. Nos entregamos mucho a la vida en estas ganas de sacar adelante cada una de las metas que nos proponemos, y en este sentido, el haber llegado por primera vez a las Islas Desertores, navegar horas y llegar a esta función que nos conmovió el alma, porque los alumnos nos ayudaron a montar, nos fueron a buscar a la lancha, nos ayudaron a trasladar las cosas hasta la escuela y después nos tuvieron un acto, fue un intercambio cultural precioso”, destacó.
Tal como destacó la gestora cultural fue un día emocionante pues los niños interpretaron algunos temas musicales del repertorio tradicional del sector, compartieron con el equipo de producción y con la compañía argentina. “Era muy emocionante el cariño con el que nos recibieron, y muy emocionante también por el nivel de soledad en que ellos se encuentran. Nos encontramos con un grupo de profesionales a cargo a todo dar, con ganas de hacer cosas y pidiéndonos que volviéramos siempre. Fue una función preciosa”, expresó.
Los niños de Chuit tuvieron la oportunidad de apreciar así una de las funciones que ha recorrido la provincia de Palena, y varios sectores de la comuna de Chaitén. Incluso, los pequeños de la Escuela Reldehue, que asistieron a la jornada, dedicaron una nota en el periódico escolar “El Lorito de Reldehue” – disponible en su página de Facebook – destacando la relevancia que tuvo este evento para ellos, en un día que fue muy especial para Fitich y esta comunidad apartada del sur de Chile.
Fueron unas 45 personas las que presenciaron el montaje de títeres. Ahora el festival continúa su itinerancia por Chaitén en la Villa Santa Lucía con la misma obra, mientras que en la provincia de Osorno, desarrolla su última función Kika Producciones (Argentina), con Kamishibai, que se presenta en la Escuela Andrew Jackson de Río Negro.